PARASHAT VAYSHLAJ 5784

AM ISRAEL COMO LA ARENA DEL MAR

PARASHAT VAYSHLAJ

AM ISRAEL COMO LA ARENA DEL MAR

En nuestra Parashá de la semana, Parashat Vayshlaj, la Toráh nos cuenta sobre el reencuentro entre Yaäkov Avinu Ësav después décadas sin verse. 

En un comienzo, la Toráh nos muestra como si Yaäkov estuviera sintiendo temor de Ësav, temor de que Ësav atente en contra de él o en contra de su familia. Sin embargo, esto es bastante curioso, ya que, si bien Ësav era un hombre fuerte y se encontraba con otros 400 hombres, Yaäkov Avinu no era menos fuerte que él, y los 12 hijos de Yaäkov eran conocidos como expertos en el arte de guerra, cada uno de ellos tenía un poder especial, tal como lo vemos en Parashat Vayejí la semana que viene donde Shimön Levi fueron solos y mataron los hombres de la ciudad de Shjem, matando 250.000 hombres según algunas opiniones y todo esto mientras Levi era tan solo un joven menor de Bar Mitzváh. Entonces ¿cómo puede ser que Yaäkov haya aparentemente temido de Ësav en ese reencuentro? Podría perfectamente haberlo vencido en ese momento ¿Por qué no lo hiso?

Yaäkov le mando a decir a Ësav a través de los ángeles que le digan “Ïm Lavan garti, va´ejar äd äta” (Viví con Lavan, y me demoré hasta ahora). Uno se pregunta ¿Qué le importa a Ësav sobre el hecho de que Yaäkov haya vivido con Lavan y haya cuidado mitzvot, y qué le importa también sobre el hecho que Yaäkov se haya atrasado hasta ahora?
En realidad, el Baäl Ha´Turim nos explica que este verso incluye una insinuación de advertencia muy clara para Ësav por parte de Yaäkov Avinu, insinuación la cual haría que Ësav entendiera perfectamente por qué no lo atacó en ese momento, a pesar de que podría hacerlo. La palabra “Garti”tiene la Guematria de 613, equivalente al número de mitzvot que tenemos en la Toráh, por ende, cuando Yaäkov le dice a Ësav “Im Lavan Garti” (Con Lavan Garti) lo que le está diciendo en otras palabras es que a pesar de que se encontró viviendo donde Lavan, que es el hombre más traicionero y sucio habido por haber (Por eso su nombre es Lavan que significa blanco, para decirnos que de lo sucio que es se hace pasar como si fuera un hombre limpio y puro como el blanco), igual así Yaäkov se mantuvo cuidando todas las 613 mitzvot, e incluso crio ahí 30 hijos e hijas sin que dejen el camino de las mitzvot, por lo que sus méritos se encuentran intactos, y sabemos que el mérito de la persona determina el resultado de la guerra.

Y luego, cuando Yaäkov le dice a Ësav que “va´ejar äd ätah” (y me atrasé hasta ahora), explica el Baäl Ha´Turim que la palabra “Ätah” en realidad representa 3 iniciales, que son ע -ת-ה, y el valor numérico de cada una de estas 3 letras son 70 – 400 – 5. ¿Por qué? Yaäkov Avinu le está diciendo a Ësav que se atrasó hasta “Ätah”, queriendo decirle que a pesar de que podría haberlo atacado ahora y vencido, sin tener ningún tipo de temor de su fuerza, no lo atacó Yaäkov porque sabía que antes de vencerlo su descendencia tendría que pasar 3 exilios que ya habían sido decretados y nuestros patriarcas lo sabían, 70 años del exilio de Babel, 400 años del exilio de Egipto, y 5 mil años del Exilio de Edom, representado por la palabra “Ätah”que sus iniciales poseen el valor numérico de 70 – 400 – 5. Yaäkov Avinu le dijo a Ësav que no había sentido hacer una guerra ahora en ese encuentro que estaban teniendo, la que la guerra final entre ellos no se llevaría a cabo ahí, sino que tendrá que atrasarse y esperar que pasen los 3 exilios, para que solamente después de que haya llegado el sexto milenio y termine el exilio de Edom, lo cual son los días del Mashiaj, es ahí que se levantará el pueblo de Yaäkov con todo el poder y vencerá a Ësav y su nieto Ämalek, tal como está escrito en Övadiah [1:21] que en ese día : “Ve´älu moshiïm be´har tzion lishpot et har ësav” (Subirán los salvadores sobre el monte de Tzión para juzgar a Ësav).

En nuestra Parashá, más adelante, aparece un verso donde  le promete a Yaäkov Avinu que no debe preocuparse dado que le asegura que pondrá su descendencia sobre el mundo como la arena que hay en el mar la cual no se la puede contar de lo numerosa que es, tal como lo trae el verso [Bereshit32:13] que dice: “ve´samti et zaräja ke´jol ha´yam asher lo isafer me´rov” (Y pondré tu descendencia como la arena del mar la cual no se puede contar de lo numerosa que es).

¿Por qué necesariamente la arena del mar? Hay otro tipo de arena, como por ejemplo la arena del desierto. ¿Entonces por qué HaKadosh Baruj Hueligió la arena del mar a la hora de querer bendecir la descendencia de nuestro patriarca Yaäkov? Explica el Malbim algo increíble respecto a esto. Trae el Malbim que cuando  creó la arena del mar, la creó con una característica especial en la cual sin importar que tanta agua haya en el mar, y sin importar el oleaje que haya en el mar, siempre la arena que se encuentra en el borde va a detener la fuerza que trae la abundante agua del mar.

Uno ve una ola cuando se encuentra en el medio del mar, y se puede notar perfectamente como la ola viene llena de fuerza y poder con absolutas ganas de penetrar la costa y destruir la ciudad, sin embargo, a medida que la ola se acerca a la costa, ¿Qué sucede? Va perdiendo fuerza, tamaño, y poder, hasta que finalmente es detenida por completo por la arena que hay en la orilla del mar. Y así mismo sucede con otra ola, y otra ola, y otra ola, todas vienen con mucha fuerza y luego se debilitan viéndose imposibilitadas de sobre pasar la arena del mar.

Ese es el motivo por el cual Ha´Kadosh Baruj Hu bendijo a Yaäkov Avinu diciéndole que su descendencia será como la arena del mar, ya que sabía que habrán pueblos numerosos que intentarían atacar a Äm Israel durante la historia para destruirlo, viniendo en numerosas manadas y con mucho pucho poder. Sin embargo, al igual que el agua del mar no puede sobrepasar la arena del mar, por muy superior que sea el mar en tamaño sobre la arena, así mismo ningún pueblo podrá vencer a la descendencia de Yaäkov – el pueblo de Israel – sin importar que tan grande lo sea. 

Esa es una de las características que tiene solamente la arena del mar. Pero hay otra característica adicional que posee la arena del mar la cual se la puede ver claramente presente dentro de Äm Israel, y es que la arena del mar cuando es golpeada por una ola lo que hace es ponerse sólida y unida, característica la cual también tenemos como pueblo que cuando nos intentan golpear, lo único que se logra es unirnos y convertirnos en más duros aun.

Una vez el Rav de Ponovich viajó a Italia para recaudar fondos para la Yeshiváh, y le pidió al chofer que por favor alcanzaran visitar en algún momento el arco de Titus. La agenda del Rav de Ponovich estaba muy copada, sin embargo, el último día del viaje encontraron una ventana de tiempo para que el Rav de Ponovich visite el arco de Titus. El Rav llegó al lugar, salió del auto, se paró un segundo, miró el arco de Titus y luego volvió al auto.

Los que estaban presentes estaban un poco en shock. Le preguntaron sobre por qué había sido tan corta su visita al arco, a lo que contestó: “En realidad no vine a ver el arco para impresionarme de su arquitectura, sino que vine para bajarme y decirle: “Titus titus, destruiste el Bet Ha´Mikdash, derramaste ríos de sangre, e igual así ¿Qué queda de ti hoy? ¡Nada más que un arco! Pero mira el pueblo de Äm Israel que intentaste destruir, aquí estamos, aun existiendo, y seguiremos existiendo más fuertes que nunca”.

El Faraón intentó destruir nuestro pueblo, y a pesar de que Egipto era considerado una potencia mundial en ese tiempo, terminaron todos bajo el mar. Nebujadnetzar, lo mismo, intentó borrar nuestro pueblo, y no pudo lograrlo, de él no quedó nada y nosotros seguimos existiendo más fuertes que nunca. Luego Haman Ha´Rashä, la misma historia, intento eliminarnos y lo único que logró fue eliminarse a sí mismo. Titus Ha´Rashä, también hiso todo tipo de atrocidades en contra de Äm Israel con la intención de eliminarlo de la faz de la tierra, derramó ríos de sangre, sin embargo, no quedó nada de él, y nuestro pueblo sigue en pie BH.

¿Todo esto gracias a qué? Gracias a que HaKadosh Baruj Hu le prometió a Yaäkov Avinu la bendición de “ve´samti et zaräja ke´jol ha´yam asher lo isafer me´rov” (Y pondré tu descendencia como la arena del mar la cual no se puede contar de lo numerosa que es).

Rabotay, hasta aquí hablamos de cómo esta bendición se nos aplica como pueblo, como un grupo, pero en realidad, esta bendición también se aplica a cada uno de nosotros en forma individual. La vida en general es un mar lleno de olas y tormentas, y cada uno de nosotros es como la arena del mar, queriendo decir que no importa el tamaño o la frecuencia de las olas que nos estén llegando, siempre debemos tener presente que no van a poder sobre pasarnos completamente, nunca, pueden llegar un poco más arriba, pero finalmente la ola será detenida. Y no solamente esto, sino que por sobre todo debemos saber que, de la misma forma que el oleaje convierte genera que la arena se ponga más firme, solida, y unida, así también dentro de nuestra vida el oleaje es lo que nos convierte en personas más fuertes y solidas en todo sentido.

Shabat Shalom U´M´Voraj.