Halel durante los 8 días de Janucá
HALEL EN JANUCÁ
Durante los ocho días de la festividad de Janucá, se finaliza el rezo matutino de “Shajarit” recitándose el Halel, y por el hecho de que se recita el Halel completo, resulta que se recita también la bendición del Halel antes y después de recitarlo. Esto aplica incluso para los Sefaradim, quienes a diferencia de los Ashkenazim no acostumbran a bendecir por el Halel que es recitado en Rosh Jodesh, dado que en Rosh Jodesh se lo recita solamente como una costumbre y no por ley, en cambio en Janucá, los Sefaradim si recitan la bendición, ya que en Janucá el Halel fue establecido “Min Ha´Din”, lo cual significa que no es solamente una costumbre, sino que fue establecido por ley, y en consecuencia se bendice al recitarlo de la misma forma que se bendice por el resto de las mitzvot. Por ende, por el hecho de que Rosh Jodesh Tevet cae dentro de la festividad de Janucá, se bendice al recitar Halel en aquel día [Shuljan Aruj, siman 783].
Respecto a las mujeres, poseemos una ley que aparentemente las debiera exentar de recitar Halel incluso en Janucá. La Guemará en Masejet Berajot [20b] trae la famosa ley que establece que las mujeres están exentas de todas las mitzvot positivas que son gatilladas por el tiempo. Quiere decir, que cualquier mitzváh que es gatillada por un tiempo específico, como por ejemplo la mitzváh de Lulav, que solamente se realiza en Sucot, las mujeres están exentas de realizarla. Basado en esto, aparentemente debiéramos exentar a las mujeres de tener que recitar el Halel, dado que es una mitzváh positiva gatillada por el tiempo.
Sin embargo, existe lugar para obligar a las mujeres a que reciten Halel en Janucá, de la misma forma que están obligadas de recitar el Halel la noche del Seder de Pesaj, dado que todo el motivo por el cual están obligadas de recitar “Halel” en el Seder de Pesaj es dado que “Af hen hayu be´otó ha´nes” (Ellas también estuvieron en el mismo milagro). Es decir, el hecho de que las mujeres también hayan estado en el milagro de la salida de Egipto, lo cual es lo que se celebra en Pesaj, aquello causa que ellas también tengan que realizar las mitzvot “Äseh” (positivas) que incluye la festividad de Pesaj, como por ejemplo la mitzváh de tomar los 4 vasos de vino durante el Seder. Por ende, por el hecho de que la Guemará [Shabat 23a] trajo algo parecido respecto a Janucáh, trayendo que las mujeres están obligadas en encender las velas de Janucáh dado que “Af hen hayu be´otó ha´nes” (Ellas también estuvieron en el mismo milagro), aparentemente las mujeres también debieran estar obligadas en recitar el Halel durante Janucá.
Sin embargo, de las palabras del Rambam y otros de nuestros sabios Rishonim, vemos claramente que las mujeres están exentas de recitar Halel en Janucá, a diferencia de Pesaj. ¿Por qué? Maran Rabenu Övadíah Yosef [Jazon Övadiah, Janucá, pagina 214] explicó que cuando se trata de la mitzváh de Halel, existe una diferencia entre el caso de Janucá y el caso de Pesaj. La diferencia es que en realidad nuestros sabios quisieron dejar a las mujeres absolutamente exentas de la mitzváh de recitar el Halel, dado que todos los decretos de nuestros sabios son siempre acordes y en similitud a los comandos que recibimos de la Toráh. Por ende, por el hecho de que la Toráh exentó a las mujeres de recitar Halel, también nuestros sabios quisieron dejarlas exentas de recitar Halel. Sin embargo, existe una excepción especial que solamente se aplica en la noche de Pesaj. En Pesaj, existe la mitzváh de tomar cuatro vasos de vino, mitzváh la cual también se aplica para las mujeres. Estos cuatro vasos fueron establecidos en representación de las 4 mitzvot que tenemos la noche del Seder, siendo el primer vaso en representación de la mitzváh de Kidush, el segundo vaso en representación de la mitzváh de Hagadáh, el tercer vaso en representación de la mitzváh de Birkat Ha´Mazón, y el cuarto vaso en representación de la mitzváh de Halel. Por ende, por el hecho de que las mujeres están obligadas en tomar los cuatro vasos del Seder de Pesaj, nuestros sabios se vieron en necesidad de obligarlas también a recitar el Halel, dado que el cuarto vaso del Seder de Pesaj se lo debe tomar junto con la recitación del Halel, tal como lo explicamos.
Quiere decir, que a pesar de que las mujeres si están obligadas en encender las velas durante la festividad de Janucá, dado que ellas también estuvieron en el milagro de Janucá, de todas formas, respecto a la recitación del Halel en Janucá, las mujeres están exentas. Por ende, incluso si es que una mujer siente la necesidad de recitar el Halel durante Janucá, no debe recitar la bendición al momento de recitarlo, dado que ella está exenta de aquella mitzváh. Al igual que el caso de una mujer la cual realiza la mitzváh de Lulav, que por el hecho de que está exenta, no debe recitar la bendición por la mitzváh, a pesar de que si tiene un mérito por la acción que hiso, como toda persona que entra dentro de la categoría de “Mi she´einó metzuvé ve´öséh” (Alguien quien no está comandado y lo hace).
EN RESUMEN
Es una obligación recitar el Halel completo durante los días de Janucá y hacerlo recitando la bendición. Sin embargo, las mujeres están exentas de esta mitzváh, por ende, en caso de que una mujer desee recitar el Halel, debe preocuparse de no recitar la bendición.