LAVARSE LAS MANOS DENTRO DEL BAÑO

Halajot “NETILAT YADAIM”

¿Acaso se puede permitir realizar “Netilat Yadaim” para comer pan dentro de un cuarto donde se encuentra una ducha, y acaso existe alguna diferencia si es que también hay un inodoro dentro?

Maran Shuljan Aruj [siman 4, seif 18] estableció para la halajá que una persona que sale del baño o del cuarto de duchas requiere lavarse las manos haciendo “Netilat Yadaim”. Sobre esto escribió Maran Ha´Jidá en Majazik Berajá [seif katan 6] - en nombre del Maharaj Cohen - que el motivo de esto es dado que dentro del baño existe algo que se llama “Ruaj Rä” (Espíritu Impuro), y este espíritu se pega en las manos de la persona, así también lo trae el Zohar Ha´Kadosh [Introducción a Bereshit, pagina 10b], que una persona la cual ingresa al baño no debe bendecir después ni tampoco estudiar Toráh hasta que se haya lavado las manos, y el motivo de esto no es porque se le ensuciaron las manos, dado que al solamente ingresar y salir sin tocar nada con seguridad no se pueden haber ensuciado las manos, sino que el motivo principal es por el “Ruaj Rä” (Espíritu Impuro) que hay dentro del baño, espíritu el cual tiene provecho de la suciedad que hay en el baño y se pega de forma inmediata en los dedos de la persona una vez que ingresa al baño. De acá Maran Ha´Jidá trajo como conclusión que incluso si la persona ingresa al baño y no hace sus necesidad – debe lavarse las manos una vez que salga de ahí para remover el “Ruaj Rä”, y así también lo decretaron para la halajá el Eliáh Rabáh [siman 227, seif katan 6], y el Ben Ish Jai [Parashat Toledot, halajá 16].

Todo esto es respecto a un baño donde hay un inodoro adentro, sin embargo respecto a un cuarto donde solamente hay una ducha, divergieron las autoridades halajicas sobre cual es su ley. Hay quienes opinan que posee la misma ley que un baño donde hay un inodoro, y entre los que opinan así se encuentra el Gaon Rav Jaim Eläzar Shapira (Admor Mi´Monkatch) y la Mishná Beruráh [seif katan 40]. Sin embargo, hay quienes opinan que un cuarto donde hay una ducha es menos impuro que un baño, y así se estableció la halajá, y la prueba para esto es de la Guemará en Masejet Shabat [41a] la cual trae que una vez que la persona terminó de bañarse - es bueno que tome del agua caliente que hay en el cuarto de baño, incluso si es que fue calentada solamente para ducharse. Y el libro Agudá [capitulo 1 de Shabat] escribió que para poder hacer esto y tomar de aquel agua, por el hecho de que esta prohibido recitar una bendición dentro de un cuarto donde hay una ducha, lo que debe hacer la persona es bendecir fuera del cuarto con la intención de querer tomar el agua que hay adentro y así luego podrá tomar aquel agua. Basado en esto, muchas autoridades halajicas trajeron prueba de que existe una diferencia entre un baño donde hay un inodoro y un cuarto donde hay solamente una ducha, dado que si es que el cuarto donde hay una ducha fuera igual de impuro que un baño, entonces por ningún motivo hubiera permitido la Guemará tomar agua dentro de él, por el simple hecho de que el “Ruaj Rä” (Espíritu Impuro) es algo que no solamente se pega en las manos de las personas - sino que también se pega en los comestibles y en los bebestibles, tal como aparece en Masejet Pesajim [112a] respecto a comestibles que quedaron bajo la cama mientras durmió la persona y la Guemará trae que se le pega el “Ruaj Rä”. Así lo trajo Tosafot en Masejet Shabat [10a], que existe una diferencia entre la impureza que hay en un baño donde hay un inodoro y la impureza que hay en un cuarto donde hay una ducha. 

Esta diferencia aplica solamente si es que el cuarto donde hay un ducha no posee también un inodoro dentro de él, pero en caso de poseer un inodoro dentro de él, a pesar de que existe un sistema de agua el cual limpia el inodoro y remueve cualquier tipo de desecho que haya dentro de él, igual así se sigue considerando como un “Bet Ha´Kisé” y la impureza reside dentro de él. Sin embargo, hubieron ciertas autoridades halajicas contemporáneas que opinaron distinto, queriendo decir que el inodoro que poseemos hoy en día, en donde los desechos son limpiados a través de un sistema de agua y removidos hacia otro lugar fuera del cuarto, posee la misma ley que los baños “Bet Ha´Kisé De´Parsaé” que trae la Guemará en Masejet Berajot [26a] y aparece en el Shuljan Aruj [siman 83, seif 4], lo cual consiste en un tipo de baño donde el lugar para hacer las necesidades de la persona posee un orificio de más de 4 Amot (2 metros aproximadamente) - por lo que los desechos caen inmediatamente a un lugar que se considera “Reshut Ajer” (otro recinto), y en consecuencia el cuarto del baño que rodea el pozo no se considera un lugar impuro donde se almacenan desechos - por lo que se permite incluso realizar la lectura del “Shemä Israel” dentro de él en caso de que no haya olor presente. Es decir, hay ciertas autoridades halajicas que opinan que el hecho de que el inodoro posea un sistema de agua que limpia todos los desechos y los lleva a otro lugar fuera del cuarto del baño hace que se considera exactamente igual como el caso del baño que trae la Guemará donde los desechos caen a un pozo de 2 metros de profundidad – lo cual sabemos que causa halajicamente una división de recintos y en consecuencia todo el cuarto de baño que rodea el pozo en realidad no posee la ley de un baño en lo absoluto cuando se trata de temas de impureza, a tal punto que incluso se puede realizar ahí la lectura del “Shemä Israel” - tal como lo vimos anteriormente, y por ende también no habría problema de bendecir ahí mientras no haya ningún tipo de olor. Entre las autoridades halajicas que opinaron así se encuentra el Shut Zaken Aharon Valkin [tomo 1, siman 1].

Sin embargo, Maran Övadiah Yosef en Yejavé Daät [tomo 3, siman 1] analizó de forma profunda este tema, y como conclusión discrepó no estuvo de acuerdo con la opinión nombrada anteriormente la cual asimila los baños que tenemos hoy en día con el “Bet Ha´Kisé De´Parsaé” que trae la Guemará donde había un pozo, básicamente por el motivo de que en el caso del pozo que trae la Guemará los desechos caen inmediatamente al pozo que se considera un recinto distinto y no permanecen ni siquiera un segundo en el recinto que pertenece al cuarto, en cambio en el caso del inodoro que tenemos hoy en día los desechos si permanecen ahí durante un tiempo y solamente a través de una acción hecha por la persona es que se puede activar un sistema que elimina los desechos del lugar. 

Por ende como conclusión, trajo Maran Övadiah Yosef lo siguiente para la halajá: Esta permitido realizar “Netilat Yadaim” para comer pan u otro tipo de lavado de manos dentro del cuarto donde se encuentra solamente una ducha, y la bendición se debe realizar fuera del cuarto. Pero cuando se trata de un baño donde hay un inodoro, no se debe ser indulgente respecto a esto a menos de que se trate de un caso muy necesario como por ejemplo dentro de un avión donde no hay otra opción para realizar el lavado de manos, que en ese caso se debe confiar en quienes opinan de forma indulgente y realizar ahí el lavado de manos recitando al bendición fuera del baño, e idealmente secándoselas también fuera del baño