PARASHAT BO

El mérito de un acto heroico

En Parashat Bo, la Toráh nos cuenta sobre un acto heroico que hicieron los perros de los Egipcios en el momento en que Äm Israel iba a salir de Egipto para siempre. Escribiendo la Toráh [Shemot 11:7]: “U´l´jol bené Israel lo yejeratz kelev leshonó” (Y a todo hijo de Israel no hubo perro que le haya ladrado).

¿Cuál es el acto tan heroico que hay acá? La Guemará en Masejet Baba Kamá [60b] trae “Klavim Bojim” (Si es que escuchas los perros llorando) “Malaj Ha´Mavet ba´ïr” (Quiere decir que el ángel de la muerte esta rondando por la ciudad). Explica el libro Torat Jaim y el Maharal, que Ha´Kadosh Baruj Hu le creo al perro un sentido especial para detectar cuando el ángel de la muerte anda rondando por la ciudad y eso causa que se ponga inquieto. Basado en esto, podemos entender cual fue el acto heroico de los perros en la salida de Egipto cuando no ladraron, y es que a pesar de que el ángel de la muerte estaba rondando aquella noche por Egipto, lo cual la Guemará nos explica que es un factor el cual causa que los perros lloren y ladren y se pongan inquietos, igual así supieron aguantarse y dominar su instinto quedándose callados, lo cual es un acto heroico ya que de no haberlo hecho y envés de eso haber comenzado a ladrar cuando Äm Israel salía de Egipto, aquello hubiera despertado a los Egipcios y hubiera retrasado o afectado de alguna forma la salida de Egipto, pero el hecho que hayan permanecido callados es lo que ayudó a que Äm Israel pueda salir rápidamente de Egipto y con calma. 

La Guemará en Masejet Baba Batra [8a] trae que hubo un año de hambruna en Yerushalaim, y Rabi Yehudá Ha´Nasí, quien lo bendijo con mucha riqueza, decidió abrir sus reservas de comida para darle al resto. Sin embargo, por el hecho de que poseía comida limitada para entregar y la cantidad de gente que necesitaba comida era muy abundante, dijo Rabi Yehudá Ha´Nasi: “Ikansu baälé Mikrá” (Que ingresen solamente personas que han estudiado mikrá) “Baäle Mishna, baäle Guemará, baäle Halajá, baäle Hagadá” (Gente que estudio Mishna, Guemará, Halajá, Hagadá) “Aval ämé ha´aretz al ikansu” (Pero gente que no pertenece a estas categorías, que no entre). Cuenta la Guemará que llegó Rabi Yonatan ben Ämram e ingresó disfrazado frente a Rebi sin que se de cuenta que era él, escondiendo su identidad ya que no quería tener goce de su nivel de Toráh para que le den de comer, para que así no se considera que esta teniendo provecho de su “Keter Toráh” (Corona de Toráh). Entra y le dice a Rebi: “Rebi Parneseni” (Rebi susténtame por favor). Y Rebi le pregunta: “Beni Karita?” (¿Hijo leíste?), a lo que le contesta Rabi Yonatan: “no”, “Beni Shanita?” (¿Hijo estudiaste?), a lo que le contesta: “no”. Y ¿Entonces por que tengo que darte de comer? Le pregunta Rebi a Rabi Yonatan. Y Rabi Yonatan le da una respuesta que es digna de se analizada: “Amar lo: Parneseni ka´kelev ve´ka örev(Le dijo: Susténtame como el perro y como el cuervo).

¿Qué significa esta respuesta entregada por Rabi Yonatan a Rebi? ¿Por qué de todos los animales le dijo: Susténtame como el perro y como el cuervo? Explican los mefarshim algo increíble, y entre ellos el Jatam Sofer. En realidad, el perro y el cuervo representan algo más allá, el perro representa lo que se llama “Zejut Avot” (Merito de los padres), y el cuervo representa “Zejut Banim” (Merito de los hijos). ¿Por qué? Ya que el cuervo es un ave absolutamente cruel, es sabido que el hijo del cuervo nace de color blanco, y los padres que son de color negro o gris lo abandonan a penas nace pensando que empollaron el huevo de otra ave, haciendo que la cría del cuervo se las tenga que valer por sí solas desde una edad muy temprana y eso causa que sea un ave muy cruel. Sin embargo, a pesar de que Ha´Kadosh Baruj Hu no quiso salvar el cuervo en el diluvio, ya que no le interesaba dejar en el mundo un ave tan cruel, igual así Ha´Kadosh Baruj Hu decidió salvar al cuervo. 

¿Por qué? Ya que dice el naví en Melajim 1 [capitulo 17] que cuando Eliahu Ha´Navi tomó la llave de la lluvia de parte de Ha´Kadosh Baruj Hu, cerró la lluvia por completo para que el pueblo vuelva en Teshuváh, lo cual lógicamente causó que haya una gran hambruna en el pueblo, y Eliahu Ha´Navi fue y se escondió dentro de una cueva. Cuenta el naví que al ver esto Ha´Kadosh Baruj Hu, comenzó a mandar un cuervo donde Eliahu Ha´Navi para que le lleve comida tanto en la mañana como en la tarde, y le llevaba un pan con carne. ¿Para qué hizo esto Ha´Kadosh Baruj Hu? ¿Por qué utilizó un cuervo y no un águila o un cóndor? La respuesta para esto es dado que quería que Eliahu Ha´Navi recapacitara y sienta misericordia por Äm Israel, ya que el hecho que haya venido este cuervo mañana y tarde a darle comida, causó que Eliahu Ha´Navi se diga a sí mismo: “Si es que el cuervo que es un animal cruel con su cría y no la alimenta, esta tienendo misericordia conmigo y me esta trayendo comida, con cuanta mayor razón que yo debo ser misericordioso con los hijos de Ha´Kadosh Baruj Hu y abrirles la llave de la lluvia para que tengan que comer”. Y así fue, Eliahu Ha´Navi despertó su misericordia y abrió la llave de la lluvia. Y todo esto ¿Por qué? Gracias a ese cuervo. 

Quiere decir que el cuervo representa el “Zejut Banim” (Merito de lo hijos) dado que gracias al merito de un hijo del cuervo el cual iba a nacer miles de años después del diluvio para darle comida a Eliahu Ha´Navi y hacerlo recapacitar, fue que Ha´Kadosh Baruj Hu salvó al cuervo en el diluvio y le dio miles de años de existencia a pesar de que es un ave cruel.

Por otro lado, el perro representa lo que se llama “Zejut Avot” (Merito de los padre), dado que gracias a que los perros supieron dominar su instinto y no ladrar cuando Äm Israel salió de Egipto, la Toráh nos dio una mitzváh de que por el resto de las generaciones [Shemot 22:30] “Terefá lo tojelun, la´kelev tashlijun oto” (No comerán carne terefá, sino que se la darán al perro), es decir, por el resto de las generaciones los perros gozan de comer carne gracias a que los padres supieron quedarse callados y controlarse en el momento que más difícil era hacerlo, aguantándose y yendo en contra de su naturaleza.

Habiendo entendido esto, ahora podemos entender lo que le dijo Rabi Yonatan a Rebi cuando Rebi le preguntó si acaso había estudiado Toráh como para poder sacar alimento de las reservas, y Rabi Yonatan le dijo “Parneseni ka´kelev ve´ka örev” (Le dijo: Susténtame como el perro y como el cuervo), ya que lo que le estaba diciendo en otras palabras Rabi Yonatan  a Rebi es: “Rebi, puede ser que yo no estudie, pero aliméntame como el perro o como el cuervo, es decir, aliméntame por mi “Zejut Avot” (merito de los padres), ya que quizás tuve padres que si eran tzadikim y tenían meritos, o alimentalmente por mi “Zejut Banim” (merito de los hijos), ya que quizás saldrán de mi personas que si van a ser tzadikim y van a tener meritos”.

Sin embargo Rabotay, hay algo que debemos aprender de este acto heroico hecho por el perro, lo cual tiene que ver con la importancia de “Zejut Avot” (merito de los padres), y es que debemos tener muy claro que nuestros actos heroicos de hoy, van a darle merito al resto de nuestras generaciones, nuestros actos heroicos de hoy de saber aguantarnos y no hacer cosas que nuestro instinto nos esta impulsando a hacerlo, y que sabemos que no es correcto, va a causar que ese merito se cuide y lo gocen el resto de nuestras generaciones, lo cual significa que cada uno de nosotros tiene una tremenda responsabilidad sobre su familia y descendientes, y también una tremenda oportunidad.

Shabat Shalom U´M´Voraj.