HALAJOT KASHRUT

“JALAV NOJRÍ” (LECHE DE OTROS PUEBLOS)

La Guemará en Masejet Ävodáh Zará [35b] trae que si es que una leche fue ordeñada por una persona de otro pueblo, de tal forma que durante todo el proceso de ordeñado no hubo nunca una persona de Äm Israel en el sector del ordeñado, aquel leche queda prohibida de ser comida por temor de que la persona de otro pueblo haya mezclado leche de un animal el cual no es kasher dentro de la leche, cómo por ejemplo leche de un cerdo o leche de un camello.

Para la halajá fue decretado que si es que una persona de Äm Israel estuvo parado mirando que la persona de otro pueblo no mezcle otro tipo de leche dentro de la leche que ordeñó, entonces la leche no queda prohibida por motivos de “Jalav Nojrí” (leche de una persona de otro pueblo). Es más, basta con que la persona de Äm Israel se pare en la entrada del centro de ordeñado o que ingrese y salga en intervalos de tiempos distintos al lugar donde se esta llevando a cabo el ordeñado, y con eso ya basta para que la leche no quede prohibida por motivos de “Jalav Nojrí”, dado que en un caso como este se asume que la persona de otro pueblo va a temer mezclar otra leche por temor de que lo pillen y pierda su puesto de trabajo. Hay autoridades halajicas que quisieron decir que incluso la presencia de cámaras a lo largo de todo el proceso de ordeñado es suficiente como para que la leche no se considere “Jalav Nojrí” (leche de una persona de otro pueblo), así lo decretó Ha´Rav Yosef Shelomó Eliashiv, y Ha´Rav Shemuel Ha´Levi Vozner

Las autoridades halajicas contemporáneas divergieron respecto a la pregunta si acaso esta prohibida una leche que fue ordeñada por una persona de otro pueblo cuando aquel persona de otro pueblo no tiene ningún animal no kasher del cual pueda sacar leche y mezclarla con la leche que ordeña del animal kasher, o si acaso en un caso como ese no se prohíbe la leche. La opinión del Radbaz [siman 75], y tras su opinión se condujo el Peri Jadash [siman 115, seif katan 6], es que en un caso como este la leche quedaría permitida a pesar que fue ordeñada por una persona de otro pueblo, dado que este decreto de “Jalav Nojrí” no es un decreto el cual fue decretado como “Davar She´Beminian”, es decir, no se decretó en cualquier caso que sea, sino que solamente en casos donde existe un temor real de que se vaya a mezclar una leche no kasher, y cuando no hay un animal no kasher presente no existe este temor. En cambio según el Jatam Sofer [Shut, tomo 2, siman 107], el decreto de “Jalav Nojrí” es un decreto general, y por ende no hay forma de permitir la leche ordeñada por una persona de otro pueblo a menos de que haya habido una persona de Äm Israel supervisando de una de las formas que se consideran validas.

Adicionalmente a esto, divergieron las autoridades halajicas contemporáneas respecto a si se puede permitir la leche ordeñada por una persona otro pueblo cuando existe un comité fiscalizador de parte del estado sobre todas las leches, el cual se encarga de verificar que no poseen mezcla de leches de otros animales. Entre las principales autoridades halajicas que permiten esto y opinan de forma indulgente, se encuentran el Peri Jadash, el Jazon Ish [Yoré Deäh, 41, 4], y el Rav Moshe Fainshtein [Igrot Moshé, Yoré Deäh, tomo 1, siman 47]. Agregando el Rav Moshe Fainshtein que por el hecho de que hoy en día cualquier fabrica la cual sea descubierta que mezcló leche de un animal impuro dentro de la leche que venden de animal puro, y no lo especificaron en el envoltorio de la leche, pueden recibir sanciones tan graves como tener que cerrar su planta de producción, resulta que con seguridad existe “mirtat” (temor) de parte de la persona de otro pueblo respecto sobre mezclar algún tipo de leche la cual no sea kasher, no porque le importe que sea kasher, sino porque le importa cumplir en un 100% con lo que esta escrito en el envoltorio de la leche que dice que es 100% leche de vaca, lo que significa que no puede haber mezclado ahí nada más que leche de vaca.

Basado en este decreto del Rav Moshé Fainshtein, y en los motivos traídos en su respuesta, muchos Rabanim fuera de la tierra de Israel evitan llamar a los productos hechos con este tipo de leche bajo el nombre de “Jalav Nojri” (leche ordeñada por personas de otros pueblos) y en cambio la llaman bajo el nombre de “Jalav Stam” (leche simple) o “Jalav Ha´Jevrot” (leche de las empresas), dado que lejatejiláh (a priori) queda permitido comer aquella leche, y no recae sobre ella en lo absoluto la severidad del decreto de “Jalav Nojrí” según esta opinión halajica. De todas formas, el mismo Rav Moshe Fainshtein terminó su respuesta escribiendo que “Le ´baälé nefesh raui lehajmir ve´en ba´zeh mishum yohará” (Una persona quien acostumbra conducirse de forma virtuosa es apropiado que sea severo respecto a esto, y al hacerlo no se consideraría que esta haciendo un acto engreído).

Respecto a la halajá practica, Maran Ha´Rishon Le´Tzion Ha´Rav Itzjak Yosef [Yalkut Yosefm Isur Ve´Heter, siman 81, seif 11] trajo ambas opiniones, tanto de quienes opinan de forma severa opinando que no se puede confiar en la ley estatal del país para permitir una leche que fue ordeñada sin supervisión de una persona de Äm Israel, cómo también la opinión de quienes opinan de forma indulgente y si permiten este tipo de leche, como Rav Moshe Fainshtein, y concluyó escribiendo que halajicamente es correcto ser severo respecto a esto y no tomar una leche que fue ordeñada por una persona de otro pueblo sin supervisión de una persona de Äm Israel, a menos de que se trate de un caso de enfermedad o para bebes. Sin embargo, en el caso de una persona quien vive fuera de la tierra de Israel y le cuesta ser severo respecto a esto, y tampoco hay opción de conseguir “Jalav Israel” (leche que fue ordeñada bajo la supervisión de una persona de Äm Israel), quien se confíe en la opinión de quienes opinan de forma indulgente respecto a esto, tiene en quien apoyarse, incluso si es que no se trata de un caso de enfermedad, siempre y cuando lógicamente exista una ley estatal que supervise que no haya mezclas de otras leches en aquella leche. 

EN RESUMEN

Halajicamente es correcto ser severo respecto a esto y no tomar una leche que fue ordeñada por una persona de otro pueblo sin supervisión de una persona de Äm Israel, a menos de que se trate de un caso de enfermedad o para bebes. Sin embargo, en el caso de una persona quien vive fuera de la tierra de Israel y le cuesta ser severo respecto a esto, y tampoco hay opción de conseguir “Jalav Israel” (leche que fue ordeñada bajo la supervisión de una persona de Äm Israel), quien se confíe en la opinión de quienes opinan de forma indulgente respecto a esto, tiene en quien apoyarse, incluso si es que no se trata de un caso de enfermedad, siempre y cuando lógicamente exista una ley estatal que supervise que no haya mezclas de otras leches en aquella leche.