Arrendó un auto y después de tener un accidente se dio cuenta que no estaba asegurado, ¿Quién debe pagar?
Arrendó un auto, y luego después de tener un accidente se enteró que el auto no estaba asegurado, ¿Quién tiene que pagar?
Esta pregunta llegó al Bet Din de Hidabrut llamado Shalom Ve´Emet, encabezado por el Gaon Rav Zamir Cohen. Resulta que llamó un hombre llamado Yonatan, quien arrendó el auto de su amigo Ämos para salir de paseo con su familia. Yonatan buscaba un auto de tres corridas de asiento, y Ämos estuvo dispuesto a arrendarle su auto el cual cumplía con las condiciones que necesitada, y lo estaba haciendo por un precio muy conveniente, más bajo que el resto de los lugares que arriendan autos.
Yonatan fue al norte de Israel con su familia, lo pasaron súper bien, disfrutaron, y resulta que a la vuelta sucedió un incidente. Al parar en una estación de bencina, Yonatan se confundió de marcha y envés de poner marcha atrás puso marcha adelante y chocó un poste que dejó toda la parte frontal del auto aboyada. BH no le pasó nada a nadie.
Yonatan inmediatamente decidió llamar a Ämos y contarle lo que había sucedido, a lo que Ämos le dijo que no se preocupe, que traiga el auto y él iba a llevarlo al día siguiente al taller para decirle en cuanto habían cotizado el arreglo.
Ämos fue al taller, recibió la cotización, y llamó a Yonatan para decirle que el taller estaba cotizando todo le arreglo en $2.500 dólares, por ende le pedía por favor que le transfiriera a la cuenta los $2.500 dólares, y que le dijera a nombre de quien generar la boleta del arreglo.
Yonatan impactado, le dice a Ämos: “¿Cómo? ¡Pensé que solamente pagaría el pie del arreglo! ¿Por qué no activas el seguro del auto y me dejas pagar solamente el pie del arreglo? Qué el seguro pague el arreglo, ¿Por qué tengo que pagar yo todo?”.
Fue ahí que para su gran sorpresa, Ämos le contesta a Yonatan: “Querido amigo, al parecer estaz confundido, ¿Quién dijo que el auto estaba asegurado con un seguro para cubrir los daños propios? El único seguro que tengo es contra daños a terceros, pero no existe seguro para los daños propios del auto en el auto que chocaste. Esa es una de las razones por la cual como bien te diste cuenta, pudiste arrendar mi auto a un precio mucho más conveniente de lo que hay en el mercado. En fin, querido Yonatan, tu tienes que pagar el arreglo de los daños por lo que te agradecería hacerme la transferencia”.
“!Perdón!” Le dice Yonatan a Ämos. “Tu no me contaste nada de esto, yo no tenia idea que el auto no estaba asegurado. Es más, si es que hubiera sabido que no estaba asegurado, no lo hubiera arrendado desde un comienzo”. Sin embargo, Ämos le dijo: “Eso no es mi culpa, el hecho de que no me hayas preguntado es problema tuyo, no mío”.
Y así continuaron discutiendo hasta que finalmente decidieron llevar el caso a un “Bet Din”. Y la respuesta que recibieron es la siguiente:
De lo que trae Maran Shuljan Aruj [Joshen Mishpat, siman 207, seif 4] vemos que existe una gran diferencia entre la obligación que tiene la empresa de seguro de pagar por un daño generado al auto de Ämos, y entre la obligación que tiene Yonatan de pagar los daños generados.
La obligación de la empresa de seguro de pagar los daños no es por el hecho de que se generó un daño al vehículo, sino que técnicamente consiste en un acuerdo entre la compañía de seguro y Ämos que a cambio de un pago mensual ellos se comprometen en devolverle el 100% de los costos que pueda costar el arreglo de un daño que se le haya generado al auto. Pero es netamente un acuerdo entre Ämos y la compañía de seguro.
Por otro lado, la obligación que tiene Yonatan de pagar los daños generados al vehículo de Ämos, es por el hecho de que Yonatan tenia un status de “Sojer” (arrendatario) al arrendar el auto, y eso lo deja obligado en pagar los daños sin importar el caso que sea, exceptuando el caso de “ones” (fuerza mayor) que lo deja exento de pagar, por ende Yonatan se lo considera como un “Adam Mazik” (una persona que generó un daño), y su obligación de pagar no tiene nada de que ver con el trato monetario que hay entre Ämos y la compañía de seguro.
Basado en esto, lo que dijo Yonatan respecto a que él no sabia que Ämos no tenia un seguro que cubriera los daños del propio vehículo, y que en caso de haberlo sabido, no hubiera arrendado el auto, no es una escusa valida en términos halajicos. ¿Por qué? Primero que todo, dado que aquello no modifica en lo absoluto el nivel de responsabilidad que tiene frente al daño causado; y dos, dado que Yonatan no dijo explícitamente al momento de arrendar el auto que la condición para arrendarlo era que tenga un seguro el cual cubra los daños del propio vehículo y que en caso de no haberlo no estaba interesado en arrendarlo, y a pesar de que lo puede haber pensado al momento de arrendarlo, ya fue establecido para la halajá por Maran Shuljan Aruj que “Devarim she´ba´lev, einam devarim” (Las cosas que la persona piensa en su corazón pero no las menciona, no se considera como si lo hubiera mencionado).
EN RESUMEN
Yonatan tiene que pagarle a Ämos el total de los daños generados al vehículo.