¿Cuál es la forma y orden correcto para encender las velas de Janucá?
¿Cuál es la forma y orden correcto para encender las velas de Janucá?
Una vez que la persona terminó de recitar las bendiciones para el encendido de las vela de Janucá, debe inmediatamente comenzar a encender las velas, y no debe remover su mano del encendido hasta que cada vela haya encendido la mayoría de la mecha que sobre sale de la vela. Una vez que haya se haya encendido la primera vela se debe comenzar a recitar “Ha´Nerot Halalu”. También es una buena costumbre recitar el capitulo de Tehilin que comienza “Mizmor shir janukat ha´Bait le´David” después de haber encendido las velas.
Cuando se encienden las velas el primer día, se enciende primero la vela que se encuentra en la parte más a la derecha del candelabro y luego el Shamash. La segunda noche se debe comenzar encendiendo la vela nueva que se agregó en aquel día y luego la vela del día anterior, por ende se comienza por la vela de más a la izquierda y luego se continua encendiendo en orden hacia la derecha. Así continuamos haciéndolo cada noche, comenzando el encendido por la vela nueva del día y luego continuando el encendido hasta el lado derecho en orden, yendo de izquierda a derecha. Al final del encendido de las velas de la mitzváh se procede a encender el Shamash. De todas formas, este orden no es imprescindible para cumplir con la mitzváh, por ende si es que la persona comenzó en otro orden, igual cumplió con la mitzváh.
Si una persona desea darle a encender las velas de Janucá a un niño pequeño, esta permitido hacerlo una vez que el padre de la casa haya encendido la primera vela, y después de eso se permite darle el resto de las velas para que un niño las encienda, incluso si es que se trata de un niño menor de Bar Mitzváh.
Respecto a la forma de encender las velas de Janucá, Maran Shuljan Aruj [siman 674, seif 1] trajo para la halajá la opinión adoptada por nuestros sabios Rishonim, entre ellos el Rosh [capitulo (2), seif (7)], Rif [9b], y el Ramban [22b], que esta permitido encender una vela de Janucá utilizando el fuego de otra vela de Janucá, siempre y cuando se haga de forma directa y no utilizando una vela de por medio, pero si es que se hace utilizando una vela de por medio, como por ejemplo si es que la persona estaba ocupando para encender las velas de Janucá una vela normal común y corriente que no es de mitzváh, y aquella vela se apagó durante el encendido, en ese caso estaría prohibido volver a encender aquella vela con el fuego de una de las velas de Janucá, dado que no es un vela de mitzváh, y sabemos que se prohíbe encender una vela que no es de mitzváh con una vela de mitzváh ya que aquello se considera un “bizui mitzváh” (menosprecio de la mitzvah). Por ende en un caso como este la forma de continuar encendiendo el resto de las velas de Janucá seria a través de que vuelva a encender aquella vela con un fuego externo que no pertenezca a las velas de la mitzváh de Janucá, o, que se encienda directamente una vela de la otra, lo cual no seria problema por ser ambas velas de mitzváh [Mishnah Beruráh, siman 674, seif katan 2].
También, si es que la persona encendió las velas de Janucá y se apagó una de ellas, y la persona desea ser severa y volver a encender dicha vela a pesar de no estar obligado hacerlo, no debe encenderla utilizando una de las velas de mitzváh que están encendidas, incluso si lo hace de forma directa, dado que sabemos que halajicamente “Kabtáh Ein Zakuk Lah” (si es que se apagó una vela que poseía condiciones de mantenerse encendida 30 minutos después de la salida de las estrellas, la persona cumplió con la mitzváh y no se requiere la persona volver a encenderla) por ende posterior a que se haya apagado aquella vela – automáticamente pasa a considerarse como una vela opcional y no de mitzváh, por eso no se la puede encender utilizando una vela de mitzváh. [Mishnah Berurah, seif katan 2 – 7; Yalkut Yosef, siman 674, seif 2].
Esta es la ley para Sefaradim, pero en cambio para Ashkenazim, según el Rama [siman (674), seif (1)] – quien es la autoridad halajica de los Ashjenazim – acostumbran ser severos y no encender de una vela a la otra incluso si se lo hace de forma directa sin utilizar una vela de por medio. ¿Por qué? Ya que ellos opinan que como sabemos que la mitzváh principal de Janucá es encender una sola vela por día y con eso ya se cumple con la mitzváh, siendo el resto de las velas que se encienden a medida que transcurren los días - solamente un “Hidur Mitzváh” (embellecimiento de la mitzvah), resulta que solo la primera vela que enciende la persona cada día es lo principal de la mitzváh, y las otras velas son de un nivel menor de mitzváh, y en consecuencia no corresponde encender el resto de las velas utilizando aquel vela de mayor nivel. De todas formas, todo esto es siempre y cuando no hayan transcurrido 30 minutos desde la salida de las estrellas, ya que si ya transcurrieron, en ese caso esta permitido tener provecho del fuego de las velas de Janucá tanto para Sefaradim como Ashkenazim, ya que ya se habría cumplido con la mitzvah.
EN RESUMEN
Las velas de Janucá deben irse situando desde el lado derecho del candelabro hacia el lado izquierdo a medida que transcurren los días, sin embargo el encendido se debe realizar siempre comenzando por la vela nueva del día haciéndolo desde la izquierda hacia la derecha, y al final del encendido se procede a encender el Shamash.
Sefaradim pueden encender las velas de Janucá utilizando una vela externa o utilizando una de las mismas velas de Janucá, ya que son ambas de mitzvah, sin embargo se prohíbe encender una vela que no es de mitzváh con el fuego de las velas de mitzváh. En cambio según los Ashkenazim estaría prohibido encender las velas utilizando una de las velas de Janucá, por lo que solamente se permite encender las velas con una vela externa. De todas formas, si es que ya transcurrieron 30 minutos desde la salida de las estrellas, en ese caso según todas las opiniones se puede encender incluso una vela externa con el fuego de las velas que se encendieron para la mitzváh.