Lugar y altura para encender las velas de Janucá
Lugar y altura para encender las velas de Janucá
Lugar del Encendido
Es una mitzváh el poner las velas de Janucá en la parte exterior de la entrada de la casa, para así publicar el milagro, y es una mitzváh ponerlas en la parte izquierda de la entrada, haciendo referencia al lado izquierdo de la persona que ingresa a la casa. La razón de esto es dado que de esta forma se logra que al momento en que la persona ingresa a la casa va a tener la mezuzáh en su lado derecho y las velas en su lado izquierdo, quedando rodeado de mitzvot. De todas formas si es que puso las velas en el lado derecho, cumplió con la mitzváh. En caso de que se trate de una entrada sin mezuzáh (como por ejemplo si es que se trata de un lugar exento de mezuzáh) entonces en ese caso debe poner las velas en el lado derecho de la entrada.
Si es que la casa posee un ante patio por donde se ingresa del recinto publico, en ese caso debe poner las velas en la entrada del patio y no en la entrada de la casa. Y si es que la persona vive en una casa la cual no posee una apertura hacia el recinto publico, entonces debe poner las velas en una ventana que de hacia un recinto publico o en una terraza que da hacia el recinto publico. Esto también aplica respecto a quien vive en un edificio, donde es preferible que cada uno encienda las velas en una ventana que da hacia el recinto publico y no en la entrada del departamento que da hacia las escaleras del edificio. A menos de que viva en un piso alto de tal forma que su velas quedan a una altura superior a los 20 amot (9.6 metros), que veremos más adelante como se debe hacer en un caso así.
En las ultimas generaciones muchos acostumbran encender las velas de Janucáh dentro de la casa, y no las encienden en la parte exterior de la entrada de la casa. Esta es la costumbre que se ha adoptado en la mayoría de las comunidades Sefaradim incluso en lugares donde no se corre peligro que personas de otros pueblos vayan a hacer algo en contra, y por ende técnicamente pueden realizar la mitzváh en la parte exterior sin problema. E incluso algunos de los Ashkenazim se conducen de esta forma. Quienes se conducen así, tienen en quien apoyar esta costumbre, en especial si es que existe un temor de que se vayan a robar las velas, o si es que se teme de que se vayan a apagar por el viento y no tienen una forma de encenderlas dentro de una caja de vidrio o acrílico transparente que pueda protegerlas del viento. De todas formas, incluso quienes se conducen de esta forma es bueno que sean severos y enciendan las velas en el lado izquierdo de la entrada de la casa por el parte exterior, tal como trajimos anteriormente, y si es que tienen una ventana que da hacia el recinto publico entonces deben encender ahí, y quienes sean severos y enciendan las velas en la parte exterior, vendrá bendición sobre ellos.
Altura del Encendido
Respecto a la altura ideal para encender las velas, Maran Shuljan Aruj [siman 671, seif 6] trajo en nombre de la Guemará de Shabat [21b] que al momento de realizar la mitzváh del encendido de las velas de Janukáh, el posicionamiento ideal de velas de Janucá debe ser dentro de los 10 tefajim de altura (80 centímetros) desde el piso del departamento, y el motivo de esto es dado que a esa altura es más notorio que las velas se encuentran para publicar el milagro, ya que cuando una persona sitúa velas con propósito de alumbrar, no lo hace a una altura tan baja. De todas formas si es que la persona situó las velas a una altura mayor a 10 tefajim de todas formas cumplió con la mitzváh.
Respecto a cuanto es la altura mínima en que se deben situar las velas para el encendido, el Tur trajo que Maharam Mi´Rotenburg era meticuloso de encenderla por sobre los 3 tefajim (24 centímetros), y así lo decretó para la halajá Maran Shuljan Aruj escribiendo que el encendido debe ser por sobre los 3 tefajim ya que más bajo que eso se considera como si es que hubiera encendido la vela en el suelo y no se nota que lo hizo con el propósito de publicar el milagro, y no importa que el cuerpo de la vela este bajo los 3 tefajim, sino que lo que importa es que la llama se encuentre sobre los 3 tefajim, y si la persona encendió la vela de tal forma que la llama quedo bajo los 3 tefajim, trae la Mishnah Berurah [siman 671, seif katan 26] en nombre del Peri Jadash que bediävad (post facto) igual cumplió la persona con la mitzváh del encendido.
Respecto a la altura máxima en la cual se pueden encender las velas de Janucá, trae Maran Shuljan Aruj [ahí] que no se debe encender una vela la cual su llama se encuentre más arriba de 20 Amot de altura desde el suelo comenzando desde vía publica (9.6 metros), ¿Cuál es la razón de esto? Explica la Guemará que sobre 20 amot “lo shaltah beh ëina”, lo cual quiere decir que sobre la altura de 20 amot los ojos de las personas no acostumbran a ver, dado que nadie camina con la cabeza mirando hacia arriba, por ende no existe publicación del milagro. Por ende, si es que la persona encendió la vela de Janucá sobre los 20 Amot, no cumplió con la mitzváh incluso bediävad, por lo que requiere apagar la vela y colocarla en un lugar válido para el encendido (dentro del rango nombrado anteriormente) y posteriormente volver a encenderlas, solo que sin recitar nuevamente la bendición, dado que Rabenu Yoel opina que hoy en día que todos acostumbran a encender dentro de le casa resulta que si es válido encender incluso sobre lo 20 amot de altura, y a pesar de que no se decretó la halajá como él, de todas formas aplicamos la regla de “Safek Berajot Lehakel”[1] y consideramos la opinión de Rabenu Yoel para no volver a bendecir.
Quien vive en un piso alto
Por ende, una persona la cual vive en un piso el cual su balcón donde podría encender las velas se encuentra a una altura mayor que 20 Amot (aproximadamente 9.6 metros) desde la calle publica, debe situar las velas en la entrada de la casa idealmente dentro del tefaj (8 centímetros) cercano a la parte izquierda del marco de su puerta para que así la persona que se encuentra entrando a su departamento tendrá la mezuzáh al lado derecho de la puerta y las velas de Janucá por el lado izquierdo de la puerta, quedando así rodeado de mitzvot, así lo trae el Sheiltot de Rav Ajai Gaon [Parashat VaYshlaj, siman 26].
De todas formas, escribió Maran Övadiah Yosef [Jazon Övadiah, pagina 36] que si es que una persona vive en un piso que se encuentra a una altura mayor que 20 amot (9,6 metros), pero tiene otro edificio en frente el cual da hacia su ventana de tal forma que los vecinos que viven en el edificio de enfrente pueden ver las velas que él enciende en su ventana, resulta que la persona puede encender las velas de Janucá en su ventana y estaría cumpliendo con la mitzváh - a pesar de que se encuentre encendiendo las velas por sobre 20 amot, ya que gracias al edificio que tiene en frente logra cumplir el propósito de Pirsumé Nisa (publicar el milagro) incluso si es que las personas que viven en el edificio del frente no son personas de Äm Israel.
Otra cosa importante que debemos saber, es que las velas deben ser encendidas en el lugar donde se las van a dejar para así cumplir con la mitzváh. Por ende no debe la persona encender la vela dentro de su casa y luego llevarlas hacia afuera, dado que en caso de hacerlo así deberá apagarlas y luego volver a encenderlas sin recitar la bendición. Tampoco se deben encender las velas mientras la persona las sostiene en la mano y luego apoyarlas, sino que primero deben estar apoyadas y luego encenderlas, ya que en caso de no hacerlo también deberá apagarlas y volver a encenderlas sin recitar la bendición.
[1] “Safek Berajot Lehakel” quiere decir que frente a una duda respecto a bendecir o no en una bendición Rabínica actuamos de forma indulgente.