Una persona recitó una bendición por un dulce y se le perdió antes de probarlo ¿Puede recitar la seguláh de “Rabi Binyamin” después de la bendición para encontrarlo?
Una persona recitó una bendición por un dulce y se le perdió antes de probarlo ¿Puede recitar la seguláh de “Rabi Binyamin” después de la bendición para encontrarlo?
Un niño preguntó algo bastante interesante, él se encontraba en un parque con un dulce en la mano, y después de que recitó la bendición de “she´hakol” antes de alcanzar a probar del dulce vino un niño y sin querer le paso a llevar la mano causando que el dulce vuele y caiga al pasto. Buscó y buscó por todo el sector de pasto donde estaba parado y no logró encontrar el dulce, por ende para salvarse a si mismo y que su bendición no se considere en vano al no poder probar el dulce por el cual bendijo - se le ocurrió utilizar la seguláh para encontrar cosas perdidas la cual consiste en decir “Amar Rabi Binyamin: Hakol be´jezkat sumin äd she Ha´Kadosh Baruj Hu meir et ënehem” (Dijo Rabi Binyamin: Todos se consideran ciegos hasta que Ha´Kadosh Baruj Hu les ilumina los ojos).
Inmediatamente al momento en que terminó de decir la seguláh, H´ iluminó sus ojos y logró encontrar el dulce, lo limpió un poco y antes de ingresarlo a su boca le surgió una pregunta.
Maran Shuljan Aruj [siman 167, seif 6] trae que si es que una persona recitó una bendición y luego antes de probar del comestible por el cual bendijo habló sobre algo que no tiene nada que ver con un requerimiento del comestible, debe volver a bendecir dado que se considera una interrupción. Pero si es que la persona interrumpió entre la bendición y la probada del comestible con algo lo cual si es un requerimiento del comestible o de la bendición, como por ejemplo si es que bendijo “Ha´Motzi Lejem Min Ha´Aretz” para comer pan y de repente se dio cuenta que no tenia sal para untar el pan, en ese caso tiene permitido decir “Tráiganme sal” a pesar de que aun no haya probado del pan - y aquello no se considera una interrupción, por lo que no requiere volver a bendecir. Por ende la pregunta de esta niño fue si acaso al haber recitado la seguláh de Rabi Biniamin antes de haber probado del dulce ¿Aquello se le considera como una interrupción y por ende requiere volver a bendecir para comerse el dulce, o si acaso por el hecho de que la recitación de la seguláh fue con el motivo de salvarlo y que su bendición inicial no vaya a ser en vano entonces quizás no se considera una interrupción?
Primero que todo nos gustaría aclarar en que consiste esta seguláh de Rabi Binyamin para encontrar cosas perdidas y cual es su fuente. En Parashast Vayerá la Toráh no cuenta que Hagar se perdió en el desierto con su hijo Ishmäel mientras aun era un niño. Ishmäel comenzó a sufrir de sed por lo que H´ escuchó sus rezos y dice la Toráh [Bereshit 21:19] : “Va´ifkaj Elokim et ëneha, va´teré beer maim, va´telej va´temalé et ha´jemet maim, va´tashk et ha´när” (Y Elokim abrió los ojos de ella – haciendo referencia a Hagar la madre de Ishmäel, y vio un arroyo de agua, por lo que fue y llenó la vasija con agua, y le dio de tomar al joven). Sobre esto trae el Midrash en Bereshit Rabáh [Parashat Vayerá, 53] que Rabi Binyamin dijo “ha´kol be´jezkat sumin äd she´Ha´Kadosh Baruj Hu meir et ënehem” (Todos se consideran ciegos hasta que Ha´Kadosh Baruj Hu les ilumina los ojos). Ya que si nos fijamos bien la Toráh no dice que H´ le creo un arroyo el cual no existía, sino que nos dice que le abrió los ojos para ver el un arroyo que ya se encontraba ahí, y sobre esto escribió el “Ëtz Jaim” que de acá vemos que incluso los ojos no pueden ver algunas veces cosas que se encuentran frente a la persona, sino que solamente pueden ver lo que se les permite ver. Es por esto que respecto a cualquier tipo de objeto perdido el cual sabemos que se encuentra solo que nuestros ojos no lo pueden ver, ocupamos los que dijo Rabi Binyamin como seguláh para que Ha´Kadosh Baruj Hu abra nuestros ojos y lo encontremos.
Respecto a nuestra pregunta el Maguen Avraham [siman 585, seif katan 11] trae en nombre del Maharil que una vez en Rosh Ha´Shaná el Baäl Tokeä vino a tocar el shofar se dio cuenta de que no salía la voz, intentó e intentó y no pasaba nada, por lo que dio vuelta el shofar y recitó dentro de él el verso de “vi´hi noäm” y luego pudo tocarlo con éxito. Sobre este hecho escribió el Dagul Mirbabáh que solamente puede ser que haya hecho esto durante las tekiöt que se hacen estando parado y no las que se hacen estando sentados, ¿Por qué? Ya que antes de las tekiöt sentados se recita la bendición de tekiät shofar, y por el hecho de que la recitación del verso “vi´hi noäm” no es una seguláh que esta comprobada que ayuda para que salga la voz del shofar – resulta que si lo recitó entre la bendición y la tocada del shofar se le hubiera considerado como una interrupción y tendría que volver a bendecir para tocar el shofar. ¿Qué vemos de acá? Vemos de lo traído por el Dagul Mirbabáh que solamente cuando la seguláh no es una seguláh comprobada es que se considera como una interrupción entre la bendición y el acto, pero si es que fuera una seguláh comprobada entonces no se consideraría como una interrupción. Por ende volviendo a nuestra pregunta, resulta que solamente si es que decimos que el recitar “Amar Rabi Binyamin” es una seguláh comprobada para encontrar objetos perdidos entonces no se le consideraría como una interrupción al niño que lo recitó para encontrar su dulce, ya que pasa a considerarse como una necesidad de la bendición misma. Y el Gaon Rab Jaim Kanievsky shelita dijo que esta es una seguláh comprobada.
EN RESUMEN
Si después de que la persona haya bendecido se le perdió el comestible antes de alcanzar a probarlo y recitó la seguláh de “Amar Rabi Binyamin: Hakol be´jezkat sumin äd she Ha´Kadosh Baruj Hu meir et ënehem” para encontrarlo – y lo encontró, no se le considera como una interrupción por lo que puede comerlo sin necesidad de volver a bendecir.