El secreto tras la acción de Rivkáh con los camellos
La HALAJÁ YOMIT de hoy a sido donada por:
Ruben Najmanovich en honor a su esposa Ariela bat Mordejai Suckewer por su Cumpleaños.
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El secreto tras la acción de Rivkáh con los camellos
En nuestra parashá de la semana, parashat Jayé Sará, la Toráh nos relata como la vida de Avraham Avinu se va acercando a su final. Su hijo Itzjak tenia la edad de 37 años cuando la esposa de Avraham quien era Saráh Imenu falleció, y Avraham tomo el rol de encontrarle una mujer a Itzjak para que pudiera casarse y continuar la descendencia. Sin embargo, claramente no cualquier mujer seria apta para tomar este cargo de ser la próxima Saráh del pueblo de Israel, es decir la próxima matriarca, por ende para encontrar dicha mujer, Avraham Avinu decidió que tendría que venir de su casa ancestral, es decir, del lugar donde tanto Avraham como Saráh habían crecido.
Tal como nos relata la parashá, Avraham Avinu no fue personalmente a buscar a la mujer quien seria la esposa de su hijo Itzjak, sino que le encomendó esta importante misión a su esclavo Eliëzer. Y la pregunta es: ¿Cómo puede ser que Avraham Avinu le haya confiado una misión tan importante y primordial a su esclavo? ¿Acaso no dudó que quizás su esclavo no vaya a tener y aplicar el criterio correcto para elegir a la mujer de Itzjak? En realidad, tal como lo vimos en parashat Lej Lejá, Eliëzer no era un simple esclavo como nosotros nos imaginamos, sino que llego a un nivel de cercanía a Avraham Avinu que la misma Toráh nos atestigua diciendo [Bereshit 15:2]: u´ben meshek beiti, hu damesek Eliëzer (Y Avram dijo: … el mayordomo de mi casa es Damesek Eliëzer) a lo que explican nuestros sabios que la palabra damesek viene a decirnos que Eliëzer “haya doléh u´mashké mi´Torat Rabó”, es decir, Eliëzer el esclavo de Avraham Avinu llego a un nivel tan alto de servicio hacia Avraham, que incluso podía enseñar y traspasar la Toráh de su amo Avraham al resto de las personas, en otras palabras Eliëzer era el alumno mas cercano que había tenido Avraham Avinu, tal como lo traen nuestros sabios respecto al verso de la Toráh que dice [Bereshit 25:2]: “Vayomer Avraham el ävdó zekan beitó ha´moshel bechol asher lo …” (Y le dijo Avraham a su esclavo anciano de su casa el cual domina sobre todo lo que tiene …).
De todas formas, en nuestra parashá veremos hasta que nivel Eliëzer entendía la responsabilidad que se le había otorgado, y es por esto que nos gustaría analizar algo dentro de nuestra parashá, lo cual nos va a revelar un punto muy importante el cual se ve presente en la mujer que fue elegida para ser la segunda matriarca de Äm Israel – Rivkáh Imenu.
Viene la Toráh y nos cuenta respecto a la escena donde Eliëzer emprende rumbo para buscar el shiduj de Itzjak diciendo [Bereshit 24:10]: va´ykaj ha´ëved äsaráh guemalim mi´guemalé adonav va´yelej, ve´jol tuv adonav be´yadó, va´yakom va´yelej el Aram Naharim el ïr Najor (Y el esclavo tomó diez camellos de su amo y todo lo bueno de su amo lo llevo en su mano, y se levantó y fue a Aram naharim a la ciudad de Najor): va´yabrej ha´guemalim mi´jutz la´ïr el beer ha´maim, le´ët ërev, le´ët tzet ha´shoavot (Hizo que los camellos descansaran a las afueras de la ciudad en el arrollo de agua, a las horas de la tarde, tiempo en el cual venían las mujeres a sacar agua del arrollo), y luego la Toráh nos cuenta algo muy interesante, viene Eliëzer y le dice a H´ Itbaraj lo siguiente [Bereshit 24:14]: ve´haya ha´naärah asher omar eleha hati na kadej ve´eshte, ve´amra shete ve´gam guemaleja ashkéh, ota hojajta le´ävdeja le´Itzjak… (Y será la joven la cual le diga que me incline su bidón de agua para poder tomar, y ella me responda que puedo tomar y también le dará de tomar a los camellos que traigo conmigo, ella será quien me demostraste que es la mujer para tu sirviente Itzjak). Y la pregunta es, ¿Qué intención tuvo Eliëzer en poner tal tipo de condición como para que específicamente eso le sirva como prueba de que aquel mujer es la indicada para servir como matriarca de la descendencia de Avraham Avinu? El Midrash cuenta que cuando Rivkah se acerco al arrollo para llenar su jarra con agua, el arrollo subió su nivel acercándose hacia ella, y Eliëzer quien se encontraba ahí viendo toda la escena vio este fenómeno suceder y de todas formas no le fue suficiente para convencerse que ella era la mujer para Itzjak, sino que tenia que ver primero que al momento de pedirle que le dé de tomar agua de su jarra - ella voluntariamente también le ofrezca darle de tomar a sus diez camellos. ¿Por qué? Rav Itzjak Soloveitchic trae que Eliëzer sabia que la prueba para elegir la Matriarca de Äm Israel no estaba basada en ver milagrs, sino que estaba basada en ver actos de bondad. Rav Hirsh trae que un camello promedio cuando tiene sed toma por primera aproximadamente 100 litros de agua, y en este caso Eliëzer trajo 10 camellos, lo cual quiere decir que darles de tomar significaría brindarles 1000 litros de agua. Lo interesante respecto a esto, es que cuando Eliëzer tomo del jarro de Rivkáh, ella no le ofreció bajar los camellos al arrollo para que tomen, sino que ofreció subirles agua ella misma, acción la cual el Kedushat Ha´Levi trae que aquello muestra signos de compasión por parte de ella, es decir, no solo demostró a través de su acto la inmensa bondad que tiene, sino que también la compasión.
De todas formas, a pesar de que existen muchas explicaciones sobre que se esconde tras la acción de Rivkáh – donde vemos que aceptó darle de tomar agua a Eliëzer y luego le ofreció darles de tomar agua a sus 10 camellos, existe una explicación increíble la cual va un poco más allá, una explicación la cual nos demuestra el nivel de sensibilidad espiritual que tenia Rivkáh Imenu.
Si nos fijamos bien, la Toráh dice [Bereshit 24:10]: va´temalé kadáh va´taäl (Y ella lleno su vasija de agua y subió del arrollo), y la pregunta es ¿Por qué Eliëzer esperó que subiera del arrollo para pedirle que le dé de tomar? Perfectamente podría haberle pedido antes de que bajara al arrollo si por favor podía traerle agua para tomar. En la respuesta para esto, se esconde un secreto muy interesante. Si bien sabemos, en aquellos tiempos cuando una casa necesitaba agua, lo que se hacia es que una persona de la familia se dirigía al arrollo y llenaba una vasija grande de agua con la cual se suplía toda la familia, por lo que cada vasija contenía un volumen de agua mucho más grande que el que puede tomar una persona de una sola vez. Eliëzer esperó a propósito que Rivkáh termine de llenar su vasija y subiera del arrollo para pedirle que le inclinara por favor la vasija y le dé de tomar, y no lo hizo antes de que bajara al arrollo ¿Por qué? Ya que Eliëzer pensó así: Dijo lo siguiente, “si es que le pido de tomar agua cuando suba con la vasija llena, quiere decir que después de que yo tome van a quedar restos míos dentro de la vasija – ya que obviamente yo no me puedo tomar todo el contenido que hay dentro de la vasija, y por el hecho de que yo me considera un extraño para ella – resulta que con seguridad no le va a llevar aquellos restos de un extraño a su familia. Por ende, ¿Qué debe hacer? Debe verter todos los restos que hay dentro de la vasija y luego volver a llenarla para llevar agua nueva para su familia ¿Cuál es el problema con eso? El problema es que al momento en que yo deje de tomar y ella vierta el resto de la vasija en mi cara para volver a llenarla, va a causar que yo me sienta mal, ya que en otras palabras me estará expresando que yo le doy asco y por eso vierte mis restos, por ende, si es que la joven es suficientemente sensible como para detectar esto y encontrar la salida perfecta para no hacerme sentir mal, automáticamente sabré que ella es la mujer para Itjak. ¿Cuál es la salida que tiene ella para no hacerme sentir mal? La única opción que tiene es ofrecer darles de tomar agua a mis camellos de a misma vasija posterior a que yo haya tomado, y de esa forma una vez que los camellos hayan terminado de tomar no habría problema que vierta los restos de agua, dado que nadie le lleva agua a su familia de la cual tomo un animal, y por ende de ser asi, esa es la mujer que me demostró H´ Itbaraj que es la mujer digna para ser matriarca de Äm Israel, por eso dice la Toráh que dijo Eliëzer [Bereshit 24:14]: “ve´haya ha´naärah asher omar eleha hati na kadej ve´eshte, ve´amra shete ve´gam guemaleja ashkéh” (Y será la joven la cual le diga que me incline su bidón de agua para poder tomar, y ella me responda que puedo tomar y también le dará de tomar a los camellos que traigo conmigo) “ota hojajta le´ävdeja le´Itzjak”… (ella será quien me demostraste que es la mujer para tu sirviente Itzjak), solamente una mujer que posee un nivel tan alto de sensibilidad espiritual a tal punto que es capas de darles de tomar a 10 camellos sedientos con tal de no hacer sentir mal a un extraño, ella será la futura esposa de Itzjak. Y así fue, efectivamente Rivkah una vez que Eliëzer terminó de tomar de la vasija, inmediatamente le ofreció darle de tomar a sus camellos, y no solo a uno, dado que ahí seria obvio que lo hizo por que le daba asco los restos de Eliëzer, sino que les dio de tomar a los 10 camellos para que no exista el más mínimo indicio que le daba asco los restos de aquel extraño.
Desgraciadamente, muchas veces sin darnos cuenta somos capaces de pasar a llevar a nuestros cercanos o lejanos por no lograr ver que se va a desencadenar de nuestras acciones. Sin embargo, la mishnáh en Avot ya nos dijo: Eize hu ha´jajam? (¿Quién es el sabio de verdad?) Ha´Roéh et a nolad (El que ve lo que va a nacer de sus acciones). H´ Itbaraj nos de el merito de crecer cada día en nuestra sensibilidad espiritual y de esta forma evitar pasar a llevar a los que nos rodean.
Shabat Shalom u´mvoraj.
