¿Debo bendecir al devolver una mezuzáh que fue removida para ser revisada?
RECITAR LA BENDICIÓN POR LA MEZUZÁH AL VOLVER A FIJARLA DESPUÉS DE LA REVISIÓN
Una persona la cual sacó sus mezuzot para revisarlas, y encontró que estaban validas, al devolverlas debe recitar nuevamente la bendición de “Asher kideshanu be´mitzvotav ve´tzivanu likboä mezuzah” antes de volver a fijarla en el marco de la puerta, y la razón de esto es dado que al momento en que la removió para revisar su validez, la persona tenia una duda respecto a si es que el estado de la mezuzáh es valido o invalido, por ende el simple hecho de considerar que podría estar invalida al removerla se considera “Hesiaj Daät” (remover la concentración de la mezuzah), lo cual significa que al volver a ponerla es como si la estuviera poniendo nuevamente por primera vez, por ende lo que debe hacer al devolver las mezuzot después de la revisión, es recitar la bendición por la primera mezuzáh que vuelva a fijar y con aquella bendición deja exentas a todas las mezuzot.
Esta ley aplica incluso si es que la persona reviso las mezuzot por sí mismo y removió las mezuzot por un tiempo corto de tal forma que no alcanzo a remover su concentración de las mezuzot [Halijot Ölam, tomo 8, pagina 261].
Y hay quienes divergen con esta opinión y opinan de que la persona no requiere bendecir en un caso en que vuelve a fijar la mezuzáh inmediatamente, dado que aquello no se considera como “Hesiaj Daät”, y solamente en un caso en que haya vuelto a fijar las mezuzot al día siguiente que las removió – es decir transcurrió un día – en ese caso requiere bendecir, pero no si es que volvió a ponerlas en el mismo día [Maharam Shik, Yoreh Deäh, siman 185; Aruj ha´Shuljan, Yoreh Deah, siman 289, seif 4; Kol Yaäkov, siman 289, seif 7]. Y quien desee conducirse como esta opinión, puede hacerlo y no pierde nada, pero se recomienda de que por lo menos piense la bendición sin pronunciarla [Ver Ben Ish Jai, segundo año, Ki Tabo, halajá 8].
Sin embargo, si es que al removerla se dio cuenta la persona de que la mezuzáh estaba invalida y por ende fue arreglada, o fijo una mezuzah nueva, según todas las opiniones requiere volver a bendecir al fijarla[1].
EN RESUMEN
Cuando se vuelve a fijar una mezuzáh que fue removida para ser revisada, debe la persona recitar la bendición antes de fijarla.
[1] Cuando la persona remueve las mezuzot para revisarlas, esta permitido removerlas todas y debe esforzarse por devolverlas lo antes posible, por lo menos antes de que anochezca, y si es que la persona sabe de que van a estar listas solamente al día siguiente, debe dejar la mezuzáh de la entrada principal y también es preferible que deje la mezuzáh de alguna de las piezas de la casa y que ahí se duerma durante aquella noche [Ha´Mezuzah ve´Hiljoteah, siman 19, seif 18, nota 27; ver Ben Ish Jai, segundo año, Ki Tabo, seif 2]. Y también se debe marcar cada mezuzáh para saber donde pertenece y asi luego devolverla al mismo lugar, dado que hay lugares donde la obligación de tener mezuzáh es de la Toráh y otros lugares son solamente de´Rabanan (Rabínico), y no se debe bajar el nivel de santidad de una mezuzáh la cual se encontraba en un lugar donde la obligación es de la Toráh y ponerla en un lugar donde la obligación es Rabínica, sin embargo, si ambos lugares estaban obligados por la Toráh no habría problema [Jovat ha´Dar, pagina 18, seif 9; Minjat Shelomóh, tomo 2, siman 97, seif 24]. Y tampoco se debe mover una mezuzáh de la puerta principal a otra puerta [Ve´Herim Ha´Cohen, tomo 2, siman 37].
